18 de agosto de 2014

A veces

Supongo que, al final, la vida entera
se resume en un acto de desapego.

Pero lo que más duele...
es no tomarse un momento
para decir adiós.

Jamás pude agradecer 
todo lo que aprendí de mis padres

Decirles que, sin sus enseñanzas... 
no habría sobrevivido.
pero desearía también haberles dicho:

Gracias por salvarme 
Siempre estarán conmigo.

No hay comentarios.: