Por mucho que algunos de nosotros luchemos contra ellos, nuestros padres tienen un místico efecto sobre nosotros... el poder de afectar a nuestros pensamientos y emociones como solo ellos quieren.
Es un lazo que cambia con el tiempo, pero no disminuye, incluso si están a medio mundo de distancia.... es un poder que nunca voy a poder comprender completamente.
Sólo me queda por preguntarme cuando llegue el momento, que tipo de relación es la tendré con mi hijo?
Vieja, me venís a ver a la Maraton?
No hay comentarios.:
Publicar un comentario